Vengeance (Venganza) es la quinta novela de la serie del
patólogo Quirke. Hasta la fecha sólo falta la última por traducir, Holy Orders,
que esperemos llegue pronto –ya está aquí, enero de 2015–. Adelantándose a ésta –a su publicación en español–,
Benjamin Black, su autor –pseudónimo que utiliza el escritor irlandés John
Banville para firmar sus novelas del género negro o policiacas– acaba de sacar,
ya traducida, su novela con Philip Marlowe de protagonista, The Black-Eyed
Blonde (La rubia de ojos negros) –ver lectura–.
Pero, como decimos, Venganza es su penúltima novela de la
serie. Y, como todas las precedentes, presenta una trama no demasiado
enrevesada, quizá podríamos decir que sencilla, o mejor, con un misterio hasta
fácil de resolver, que no obvio, porque lo que de verdad importa en estas
novelas no es tanto la intriga como el desenvolvimiento de los personajes,
principalmente de los protagonistas que aparecen en todas ellas, algo menos los
otros. Y los que aparecen en todas ellas son, en primer lugar, Quirke, un
patólogo o médico forense, con una poca demasiada curiosidad. También con
evidentes problemas de bebida. También solitario, a pesar de sus habituales
enamoramientos o desahogos sexuales en las sucesivas novelas, como iremos
viendo. Y con él su entorno familiar, aunque su familia no sea estrictamente
una familia al uso o, más bien, es lo contrario a una familia, lo más alejado
de ella, y, precisamente por eso mismo, la personalidad de todos ellos y sobre
todo de Quirke se vea afectada por ello.
En Christine Falls (El secreto de Christine) se nos
presenta el personaje en una trama, quizá la más compleja de todas ellas, donde
el lector va a ir descubriendo a medida que avanza el argumento no sólo a
Quirke sino también a su entorno familiar. Porque en realidad el misterio tiene
que ver con los secretos escondidos que hay en su propia familia. Quirke, niño
adoptado, que ha pasado la primera etapa de su vida en orfanatos y hospicios
para niños, se va a encontrar envuelto en una investigación sobre, en
principio, la causa de la muerte de una joven, Christine Falls, que, realizada
la autopsia, no tiene nada que ver con la que pone en el expediente, que habla
de una embolia pulmonar, cuando en realidad ha sido a causa de un parto donde
la joven se desangró y de cuya hija se ha perdido cualquier rastro. Y es ese
rastro, que Quirke va a ir siguiendo a pesar de las advertencias, como la
paliza que se lleva a mitad de la novela y que le destroza una rodilla, a pesar
de las personas envueltas, su familia más cercana, su padre adoptivo, el juez,
ya jubilado, Garret Griffin, e, indirectamente, su hermano Malachy, y su
familia política, el padre de su mujer Delia, muerta hace veinte años, y de la
hermana de esta, Sarah, casada con su hermano, pero de la que siempre ha estado
enamorado Quirke, el padre, decimos, el millonario Josh Crawford, mantenedor
junto a otros, de una serie de hospicios en Boston y otros lugares de Estados
Unidos, que acogen niños que luego serán repartidos por el país y que provienen
de Irlanda. Y es ese rastro el que persigue la curiosidad de Quirke y que va a
permitir desvelar ese tráfico de niños bastante alejado de la legalidad
realizado por esas instituciones católicas y financiado por altos personajes
dublineses.
Junto a ese descubrimiento, también en esta primera
novela, podemos intuir los motivos del alcoholismo de Quirke, de su soledad, de
su falta de empatía social, podríamos decir, y todo ello tiene que ver con la
que en principio se nos presenta como su sobrina, Phoebe, hija de Sarah y Mal,
pero que en realidad es hija del propio Quirke y de Delia, muerta, como
Christine Falls, en el parto de su hija, y que a sus veinte años descubrirá lo
que Quirke se ha negado a decirse a sí mismo y a ella y que le hará cambiar
totalmente su propia personalidad y su vida, de una joven alegre y jovial, con
ganas de salir al mundo, se convertirá en una ser apocado y escondido, como
veremos en las sucesivas novelas de la serie.
De ahí que en la siguiente, The Silver Swan (El otro
nombre de Laura), la propia Phoebe no quiera apenas saber nada de Quirke, a
pesar de los intentos de éste de dejar el alcohol y de alguna forma redimirse.
Aunque en realidad la novela se nos presente esta vez en un principio como algo
ajeno al ámbito personal de Quirke. Se ha encontrado muerta a una tal Deirdre
Hunt y todo indica que se ha suicidado. Pero su marido, excompañero en la
universidad de Quirke, acudirá a éste, encargado de la autopsia, para
solicitarle que no la haga. Pero a medida que avanza el caso, se irá
descubriendo que Deirdre Hunt también es Laura Swan, en una suerte de
desdoblamiento que también se muestra en la propia estructura de la novela,
cuando el autor nos va presentando a la protagonista en capítulos alternos con
los de la propia investigación. De alguna forma esta estructura ya la había
trabajado el autor en la novela anterior, aunque ahí el desdoblamiento era
entre Dublín y Boston y tenía que ver con una trama secundaria, la de los
padres adoptivos de la hija de Christine. En este caso, ese desdoble nos sirve
para conocer a los otros implicados en la vida secreta de Deirdre, cuando es
Laura, es decir, el doctor Kreutz y, sobre todo, Leslie Swan, o Silver Swan.
O'Connell Street Lowel desde River Liffey Dublín (Foto: Archivo personal) |
En esta segunda novela adquiere algo más de protagonismo
el inspector Hackett, como alter ego de Quirke, que mantendrá en las
siguientes, y sobre todo Phoebe, con su affaire postrero con Leslie y que nos
señala una de las nuevas características que tiene, la de caer en el peligro de
una forma casi intencionada, como una huída hacia delante.
Mayor protagonismo si cabe tendrá en Elegy for April (En
busca de April), la tercera de la serie, donde el misterio se encuentra en la
desaparición de April Latimer, uno de los miembros del cogollito, el grupo de
amigos de Phoebe, que incluye a la desaparecida, médico residente en el
hospital del propio Quirke, al periodista Jimmy Minor, al estudiante de medicina
Patrick y a la actriz Isabel Galloway, además de la misma Phoebe. Y es ella la
que pedirá la ayuda de Quirke, preocupada por su amiga. Nuevamente las mentiras
familiares, esta vez de los Latimer, de la alta burguesía de Dublín, serán las
causantes de los hechos posteriores.
Del mismo modo que en A Death in Summer (Muerte en
verano), el pretendido suicidio de Richard Jewell, otro adinerado hombre de
negocios, es un asunto de familia. Aunque aquí, encontramos de nuevo las
huellas de aquellos Caballeros de San Patrick que ya aparecieron en Christine
Falls, y su implicación en esas instituciones para niños sin hogar, con un oscuro
asunto de pederastia como el trasfondo oscuro de todo. En esta novela se
desarrolla e introduce un nuevo protagonista, el ayudante de Quirke en el
departamento de patología del Hospital de la Sagrada Familia, David Sinclair,
un judío que acabará teniendo relación con Phoebe, como veremos en Venganza.
El título de esta última es bastante explícito a la hora
de determinar el origen del suicidio de Victor Delahaye y de la muerte de su
socio Jack Clancy. Ambos pertenecientes a dos familias fuertemente relacionadas
en los negocios y en su vida personal, y esas tensas relaciones son el meollo
de la trama de esta quinta novela. Es de las cinco –ver lectura
de la sexta, Órdenes sagradas / Holy Orders– en la que menos ocupan protagonismo los personajes
habituales y su aparición e implicación es más tangencial. Incluso Dublín
comparte protagonismo con el condado de Cork. Por eso nos damos cuenta de que
la curiosidad de Quirke se torna en el elemento imprescindible en la serie y
quizá por donde decae incluso, ya que nos alejamos precisamente de lo que la
había sostenido hasta ahora: los problemas familiares, no de otros como aquí,
sino del propio Quirke y sus allegados.
2006. Christine Falls (El secreto de Christine).
2007. The Silver Swan (El otro nombre de Laura).
2010. Elegy for April (En busca de April).
2011. A Death in Summer (Muerte en verano).
2013. Holy Orders (Órdenes sagradas). Lectura
Buena panorámica de sus novelas. Acabo de descubrir a este autor con Venganza. Me enganché desde el primer momento. Ahora estoy con Muerte en verano. Me encanta el genero policial. Consultaré este blog más seguido.
ResponderEliminarGracias por tu comentario. Quizá las mejores sean las primeras de la serie aunque las que citas mantienen el nivel, por supuesto.
ResponderEliminarHola! Acabo de descubrir tu blog porque estoy empezando con venganza, pero, creo que es recomendable empezar desde El secreto de Cristine, cierto?
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